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sábado, 17 de marzo de 2012

EL ELCHE EN CAIDA LIBRE




Tres goles de Julio Álvarez, dos de falta directa desde treinta metros, han servido para que el Numancia rompa la buena racha a domicilio del Elche y el equipo soriano siga mirando para arriba en la clasificación.

El jugador hispano-venezolano, en su regreso al once titular tras su ausencia en Balaídos por sanción, fue el ariete del sexto triunfo consecutivo del Numancia en Los Pajaritos. El Elche, bien en la primera parte, no tuvo ninguna opción de acortar en la segunda y se perdió en faltas que sólo beneficiaron a su rival.

La primera parte no defraudó en intensidad a los aficionados en un encuentro entre dos equipos que quieren mirar a los play-off de ascenso. Pero tras el primer aviso de Juanjo, en un balón peinado en el primer palo al saque de un córner, el Elche fue ganando el centro del campo, a base de una presión que hizo casi desaparecer el habitual juego combinativo de los numantinos.

El conjunto visitante sabía a lo que venía a Soria. Presión adelantada en la medular y salida por las bandas y, en caso de dudas, pases en diagonal para ganar la espalda a la defensa rojilla. El Elche tuvo su ocasión en una pifia de Culebras en el despeje y un centro-chut, desde el lateral del área grande, de Nicki Bille que pasó por debajo de las piernas de su compañero Linares, cuando lo más fácil parecía el remate a puerta (min. 9).

Ante este juego, el Numancia se encontró incómodo y sólo creó peligro cuando contragolpeó, con Julio Álvarez con director de orquesta en la posición de enganche con la delantera. En uno de estos contragolpes, llegó el primer gol local. Natalio centró al corazón del área grande, donde Bedoya chutó para que Juan Carlos sólo pudiera despejar en corto. Julio Álvarez, que acompañaba la jugada, materializó el gol.

Un error en la salida del balón de Nagore le pudo costar el empate al Numancia si Nicki Bille hubiera llegado al pase en diagonal. Y Julio Álvarez sumó el segundo de la tarde con un lanzamiento de falta desde treinta metros en el que el meta Juan Carlos se comió el bote envenenado.

Pero el Elche no se rindió. Zabal sacó una mano milagrosa a disparo de Xumatra y, después, se tiró a los pies de Nicki Bille, tras un error en despeje de Cabrera. Dos ocasiones claras, muy claras, para por lo menos acortar el marcador. Pero la reanudación fue otra historia para el Elche. La entrada al césped fue un espejismo, porque la ocasión clara de Linares -en una salida con dudas de Zabal- dio paso a cuarenta y cinco minutos con las ideas ofensivas demasiado nubladas, ante un Numancia que reculó en el primer cuarto de hora para esperarle y jugar a favor de resultado.

El Elche tuvo más posesión pero sin peligro en el área rival. Y a la hora de defender, jugó al límite e incurrió en demasiadas faltas -sancionadas- lo que facilitó el trabajo al Numancia. En una de éstas, Julio Álvarez (min. 70) cerró su particular cuenta con un lanzamiento de falta desde 35 metros que, tras golpear a la barrera, engañó al portero Juan Carlos. Con tres en la mochila, el Numancia pudo darse un festín, pero ya era suficiente ante un rival que se terminó perdiendo en su propia intensidad.

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